martes, 13 de enero de 2015

Toledo: una historia y tres ases

Imágenes vídeo: el 80% de las fotos han sido tomadas en Toledo 
por Ana María Zaharía, excepto las del interior de los museos que provienen de fuentes de Internet

Fotos: Ana María Zaharía

Voz en off: Ana María Zaharía

Vídeos: Ana María Zaharía 

Montaje vídeo: Ana María Zaharía y Polina Yana Bondarenko


Step 1: Toledo, la Ciudad de las Tres Culturas 

Hacemos un viaje por Toledo. Nos adentramos en lo más profundo de la Ciudad de las Tres Culturas. Descubrimos un laberinto de historia viva y compartida que une a judíos, cristianos y musulmanes. Cada monumento, cada callejón, cada arco que atraviese las murallas se refleja en cada una de sus piedras.  





Step 2La lucha hacia la supervivencia del damasquinado toledano 

Hacer una historia exhaustiva de la artesanía toledana es labor que bien merece un espacio mayor del que se nos puede marcar. Testificar la antigüedad del damasquinado toledano requiere el hallazgo de pruebas históricas que autoricen a afirmarlo, pero el arte era algo que complementaba los conocimientos de aquellos magníficos artesanos de los metales, que lo mismo forjaban, cincelaban, repujaban, grababan o damasquinaban.

Piezas damasquinadas. Fuente: AlasorillasdelTajo
Se llegó a afirmar que ya se estaba damasquinando en el siglo XVII en Toledo. Este oficio se convirtió en la seña de identidad de la ciudad pero, con el paso del tiempo, el arte del damasquinado toledano se vio afectado por una serie de factores.

Platos y cofres trabajados en oro de 24 quilates. Fuente: AlasorillasdelTajo
Miguel Nombela es artesano. Empezó el oficio con 13 años y desde muy pequeño no ha dejado de lado su pasión por la artesanía toledana. Muchos años de trabajo en un taller pequeño, muchas horas de dedicación para llevar a cabo su labor pero en ningún momento se rindió.

No lo ha hecho antes, ni lo hace ahora cuando se ve inmerso en una situación complicada a raíz de la aparición del producto manufacturado y la crisis que estamos viviendo.

En un par de meses Miguel se ve obligado a dejar el antiguo taller y buscarse la vida como consecuencia de las malas condiciones y el elevado precio del alquiler pero se mantiene firme y optimista, mira de cara al futuro y apuesta  con decisión por preservar el arte de aquel que ajusta el alma a través de las manos para hacer algo único. 




En esta lucha por la convivencia se encuentran también los pequeños comerciantes, todo ello debido a la crisis por la que estamos pasando que ha repercutido negativamente sobre el turismo en general y el comercio en particular. 

José Luis es el dueño de dos establecimientos en Toledo. Lleva más de 40 años trabajando en el ámbito de la artesanía toledana. A su cargo tiene varios empleados a los que quiere mantener a pesar de la situación difícil que está afrontando actualmente. Al igual que Miguel, apuesta por preservar el valor del arte toledano. Afirma que nunca el sector de la artesanía toledana ha pasado por una crisis tan fuerte y nos explica cuáles considera que son las causas de la pérdida del valor del trabajo artesanal. 




Step 3: El proceso de fabricación de las espadas toledanas 

Cuenta la leyenda que al río Tajo se le han atribuido propiedades casi milagrosas, desde la eficiencia de sus aguas para templar, hasta la arena del mismo donde se cree que se encuentra la clave del acero toledano.

El hombre empezó a  crear moldes con los que podía obtener después reproducciones de los objetos que creaba. Nació así la técnica de la fundición (proceso de fabricación de las piezas, consistente en fundir un material e introducirlo en un molde)  que se desarrolló posteriormente a gran velocidad hasta llegar a los cuchillos y a las espadas. Fue la espada de bronce la que inició este proceso hasta llegar más tarde a la aparición de nuevas composiciones de metales, ideales para conseguir más dureza y elasticidad. 

Hace muchos siglos comenzaron a fabricarse las espadas de Toledo con un acero muy duro y empuñadas por los brazos más terribles del mundo. El origen de estas piezas  viene desde la antigüedad. En el siglo V los herreros forjaron las llamadas falcatas  configuradas por una lamina de hierro en el interior y un diseño único hecho para aumentar la brusquedad de la raya vertical. Muy conocidas eran en aquella época de modo que fueron empleadas por Hannibal y las legiones romanas.

Espadas toledanas. Fuente: AlasorillasdelTajo
Este arte de fabricación de las espadas toledanas fue evolucionando con el paso del tiempo debido a la calidad del acero. Cuando Toledo fue invadido por los musulmanes estos adoptaron la técnica de los espaderos toledanos para la reproducción de sus propias espadas, llamadas cimitarras.

Cazoletas españolas, falcatas. Fuente: AlasorillasdelTajo
El misterio que ocultaba este proceso fue un secreto muy bien guardado por los fabricantes hasta que los reyes de todas partes del mundo comenzaron a fabricar sus espadas y sables. 

El hierro que se está forjando se somete al fuego que lo hará blando. Se golpea fuertemente la barra roja para lograr dar la forma adecuada a la hoja que se moldeará posteriormente. Los golpes sincronizados y el martillo del forjador moldean cuidadosamente el hierro y lo preparan para la siguiente operación de la forja.


Una vez forjada la hoja se somete de nuevo al fuego y el forjador la introduce directamente en el agua. Con este cambio brusco de la temperatura del metal la hoja adquiere su temple: en dos palabras, dureza y flexibilidad.


Pero el proceso de fabricación de las espadas es muchos más complejo de lo que parece. 

Antonio Arellano es artesano. Durante toda su vida se ha dedicado a la fabricación de las espadas. En su taller del polígono industrial de Toledo se pueden encontrar diferentes modelos, cada uno destacando por encima de otro. Hasta allí nos hemos desplazado para que nos explique mejor, paso por paso, el proceso de fabricación de las espadas. Esto es lo que nos cuenta: 


    
                                                 
Tres son los ases que juega Toledo: su patrimonio inigualable, el arte del damasquinado y la calidad del acero. En ello se envuelve la historia de la Ciudad de las Tres Culturas, una ciudad que enamora desde todas partes y en todos sus puntos. 



4 comentarios:

  1. Que maravillosa artesanía tenemos en Toledo.
    Es lamentable, que se le de tan poca importancia por los responsables de la ciudad, a nuestro arte, que también forma parte del Patrimonio de la Humanidad. El damasquinado, arte único en el mundo, en este momento. Es sin duda alguna la artesanía más rica que existe en España, y está al borde de la extinción. Mi más grande respecto hacia los artesanos damasquinadores, que deambulan por los comercios, intentando vender sus productos artesanales. Cuando desaparezcan,,,, y no tardara mucho, ya que sus edades son avanzadas, que pasará con nuestra artesanía, que podremos decir, a los miles de turistas, que nos visitan a diario, cuando nos pregunten ... está hecho a mano ? cuantos artesanos hay en Toledo ? Se puede ver trabajar ?. Tenemos una artesanía rica en sus materiales que se utilizan, rica en la diversidad de dibujos que se puede realizar, rica en la variedad de artículos que se ofrecen. ...... No dejen que desaparezca, y pongan manos a la obra antes de que sea demasiado tarde.

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  2. Antonio Arellano, ilustre espadero. Gracias, por tu dedicación, y continuidad en la fabricación de espadas. Eres un luchador nato, . Por favor, no nos dejes y sigue con tu trabajo, aunque solo sea por afición .
    Que lejos, queda poder decir, que Toledo es la ciudad de las espadas. En la actualidad, creo que solo quedan dos maestros espaderos, que continuan haciendo sus espadas a mano. Lo demás, son fabricas, que fabrican sus productos a base de fundiciones y moldes de zamac, donde sus hojas son cortadas a prensa,.
    En la actualidad, la espada es un producto, que ha bajado mucho en ventas, sobre todo la espada artesanal, por el precio que conlleva.
    Que nostalgia me produce, cuando camino por las calles de Toledo, y recuerdo el tintineo de los martillos sobre las hojas de acero, el ruido del fuego de las fraguas, el olor al aceite quemado. Eso ya no volverá.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Con el apoyo de todos y la colaboración mutua espero que se siga conservando el valor de la artesanía toledana y todo lo que conlleva el Patrimonio de la ciudad.

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